Te lleva a la página de inicio Biografía de Adolf Hitler

 

            Braunau am Inn, Austria, 20-IV-1889-Berlín, 30-IV-1945.
            Político. Jefe del estado alemán desde 1933 hasta 1945.
Hitler carecía de formación especializada. No finalizó la enseñanza secundaria y no fue admitido en la Academia de Bellas Artes de Viena. Hasta 1913 vivió en la capital austríaca gracias a los cuadros que pintaba y a una modesta pensión de orfandad. Al estallar la I Guerra Mundial se alistó voluntario y pronto mostró gran valentía en el combate, aunque sus superiores consideraron que no tenía capacidad de mando y, por ello, sólo consiguió ser ascendido a cabo. Tras el final de la guerra se estableció en Munich y permaneció en el ejército como oficial de instrucción hasta 1920. En 1919 se unió al Partido Obrero Alemán, luego llamado como Partido Nacionalsocialista Alemán del Trabajo, de carácter nacionalista; y en 1921 fue elegido su presidente (Führer, guía). Como presidente de este partido difundió las ideas del mismo, fundamentalmente el desprecio por la democracia y el odio racial y no tardó en conseguir el apoyo de altos mandos del ejército y de la alta burguesía. En noviembre de 1923 Hitler encabezó una rebelión contra la República de Weimar y se proclamó canciller, pero el nuevo régimen fracasó por la falta de apoyo del ejército y Hitler fue condenado a cinco años de prisión. Durante su encarcelamiento redactó "Mein Kamp" (Mi lucha), una autobiografía y en diciembre de 1924 se benefició de una amnistía general y fue liberado.
          Se dedicó entonces a la reconstrucción de su antiguo partido. En 1929, en el contexto de la gran crisis económica, Hitler ganó el apoyo de muchos ciudadanos y, consecuentemente, también su voto, culpando a los judíos y a los comunistas de la grave situación económica y prometiendo crear puestos de trabajo y recuperar el prestigio como país. Con estas ideas el partido Nacionalsocialista Alemán del Trabajo consiguió 107 escaños en 1930 y continuó creciendo hasta que, finalmente en enero de 1933 ganó las elecciones y Hitler fue nombrado canciller. Pronto se autoproclamó dictador y envió a sus adversarios a campos de concentración, al tiempo que, gracias a la mayoría absoluta de su partido en el parlamento, aprobaba una ley que transfería su propio partido el control de la burocracia y de la justicia, prohibía los sindicatos (que fueron sustituidos por el Frente del Trabajo dirigido también por el partido) y los demás partidos políticos. Además las autoridades nazis tomaron el control de los medios de comunicación y de las entidades culturales, todo ello con el apoyo de la Gestapo, la policía secreta.
Hacia 1935, contraviniendo lo pactado en el tratado de Versalles tras el final de la I Guerra Mundial, se procedió al rearme de Alemania, que no tardó en anexionarse Austria, los Sudetes (1938) y el resto del territorio checoslovaco (1939). Además, intervino a favor del general Franco en la Guerra Civil española (1936-1939), pudiendo así desarrollar tácticas y estrategias que luego emplearía en los enfrentamientos de la II Guerra Mundial. En septiembre de 1939 invadió Polonia, tras haber firmado con la U.R.S.S. un pacto de neutralidad que comprometía a Alemania a entregar a la Unión Soviética parte del territorio polaco que pudiera conquistarse. Aunque esto provocó la declaración de guerra a Alemania de Gran Bretaña y de Francia, el ejército alemán avanzaba inexorablemente y en 1940 Noruega, Dinamarca, Los Países Bajos y Francia, fueron invadidas. Entonces Hitler, planeó la invasión de la U.R.S.S.. Para ello conquistó primero los territorios de los Balcanes, para tener protegido ese flanco y en junio de 1941 invadió la U.R.S.S. Pronto el ejército alemán se plantó a las puertas de Moscú, pero en diciembre el ejército soviético les obligó a retroceder. En ese momento los E.E.U.U. decidieron entrar en el conflicto y Hitler se percibió de que, enfrentándose a ambas potencias al mismo tiempo y a los aliados europeos, ganar la guerra iba a ser casi imposible. Aun viendo la inminente derrota militar, Hitler continuó con la guerra y con las matanzas de judíos en los campos de concentración. En julio de 1944 un grupo de oficiales alemanes conspiró para asesinar a Hitler, pero su intento fracasó. Finalmente fue el propio Hitler quien puso fin a su vida tras la derrota de Alemania en la II Guerra Mundial, suicidándose en Berlín junto a su reciente esposa Eva Braun.

 

Texto escrito por Pilar Rivero para http://www.documentarte.com          Proyecto Clío