Esta contribución es parte del material inédito elaborado para la guía de visitas arqueológicas del curso "Las provincias del Imperio Romano", celebrado en Zaragoza en septiembre de 1998.
Ubicación: Oliete (Teruel). 41º 00´ N - 3º 01´ E
Tipo de asentamiento: Ibérico. Poblado fortificado.
Historia de las Investigaciones: En 1948 se realizaron las primeras dos campañas de excavaciones por J.Galiay, acompañadas luego de unas prospecciones llevadas a cabo por F. Orensanz, cuyos materiales fueron más tarde publicados por A. Beltrán (1958). Desde 1977 el Museo Arqueológico de Teruel realizó excavaciones periódicas hasta 1982. Las campañas de Galiay pusieron al descubierto la estructura urbanística del poblado, que sí fue publicada, mientras los materiales hallados en dichos trabajos permanecieron inéditos. En las campañas del Museo de Teruel se procedió a la excavación total de una manzana de casas (1977-1981) y al adecentamiento de los restos exhumados en El Palomar para protegerlos de los principales problemas a que se veían sometidos (salida de aguas, erosión y acumulación de tierras y permeabilidad de los muros).
Generalidades: 0,3 has. Poblado fortificado con un solo nivel de ocupación (iniciado en el siglo III a. C.) subdivido en varias capas de acumulación, con algunos niveles de abandono previos en cualquier caso a la destrucción del yacimiento, cuyo momento debe buscarse hacia el primer cuarto del siglo I a. C., entre el 79 o el 72 a. C., en el contexto de las guerras sertorianas. Por sus reducidas dimensiones no parece que fuera una ciudad ya que apenas vivirían en él unas pocas familias.
Urbanismo: El esquema urbanístico del poblado es poco conocido. Organización de la red viaria en torno a una calle central a la que se abren diferentes viviendas y con la que el resto de calles se cortan en ángulo recto. Dicha calle central contaría con una inclinación apropiada para aliviar las aguas de la lluvia. Todas las calles aparecen perfectamente enlosadas. En el cruce de algunas calles se han detectado espacios más amplios, presumiblemente plazas.
Arquitectura pública: Apenas ha sido estudiada su muralla, con torre interior.
Arquitectura privada: Se conocen muy bien treinta habitaciones agrupadas en una manzana que se abre a las calles antes referidas. Los muros de las viviendas son de piedra, de aparejo irregular asentados sobre el suelo natural o sobre un preparado de barro. La parte superior de los muros es de adobe a partir de una altura variable según las estancias. Los suelos eran de arcilla compacta o grava. Los accesos al exterior se situaban al nivel de la calle o bien se efectuaban por medio de escalinatas de dos o tres peldaños. Las puertas tenían losas de piedra sobre las que se colocaban umbrales de madera. Las viviendas contaban con dos plantas, una baja, rectangular o alargada, destinada al almacenamiento (cuadras, bodegas) y otra superior para la residencia. Cubiertas de vigas de madera y entramado de cañas y ramaje aglutinado con barro. Algunas de las casas presentan en pozos abiertos en su interior enterramientos infantiles.
Restos muebles: Abundantes restos de cerámica ibérica, a mano y a torno (formas ibéricas clásicas como los kalathoi, cráteras, vasijas troncocónicas, jarritos, thymiateria, etc), cerámica Campaniense A, B, y en menor medida C, cerámica común (dolia, ánforas). Algunos fragmentos de cerámica ibérica decorados con motivos geométricos (bandas, semicírculos, ajedrezados), vegetales o incluso figurados. Abundantes pondera de telar con los grafitos ibéricos il y du, también presentes en piezas de cerámica, posiblemente indicadores del alfarero. Escasos objetos metálicos (alguna fíbula, botón o plaqueta de bronce y picos, argollas o clavos de hierro). Abundante material lítico (alisadores, machacadores, molinos de cereal...).
Fuentes numismáticas: Posible ubicación de la ceca de Ildugoite (en este yacimiento o en el vecino de San Pedro) relacionada por algunos autores con la Iologum, mansio citada por el Ravenate situada entre Contrebia y Lintilibin en la vía que comunica Caesaraugusta con la costa. Según Asensio, dicha identificación ha de ser desechada. En el yacimiento se ha hallado un tesorillo de monedas (94 denarios de Bolskan, 2 monedas de bronce de Beligion y 2 de Contebacom), diez denarios de Bolskan y un denario romano de ceca no identificada fechable entre el 116-115 a. C.
Fuentes epigráficas: - - -
Fuentes literarias: Ravenn, 310, 13.
Bibliografía selecta: Galiay, J., "Excavaciones en El Palomar (Oliete, Teruel)", Caesaraugusta, 1, Zaragoza, 1951, pp. 35-36; Ripoll, E., "Noticias de poblados en el NE de la provincia de Teruel", Teruel, 13, pp. 122-124; Atrián, P., "El Palomar (Oliete, Teruel)", Teruel, 66, 1981, pp. 318-319; Atrián, P., "El Palomar (Oliete, Teruel)", Teruel, 68, 1982, pp. 259-263; Atrián, P., "El Palomar", Carta Arqueológica de España. Teruel, Teruel, 1980, pp. 194-197. Vicente, J. et alii, En Oliete hace dos mil años , Teruel, 1990.
J. Andreu y M. P. Rivero (Universidad de Zaragoza) Proyecto Clío