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En el agón es donde se combinan mejor utopía y absurdo, lo serio se combina con lo paródico al tiempo que el deleite hace que la reflexión sea distendida y no muy profunda.
Para analizar el absurdo hay que recurrir también a la división entre planteamiento teórico comunista y la realización en la práctica de la administración del estado. De la oposición en esta escena agonal de utopía y absurdo nace el desarrollo posterior de la obra en su segunda parte, ya que la utopía comienza a ridiculizarse ya en su propio planteamiento para ser puesta en la picota y ser abandonada en la segunda parte de la obra en las escenas cómico-paródicas donde la burla, ingenio y fantasía de Aristófanes se desbordan.
Roberto Lérida (IES Serranía Baja, Landete -Cuenca-) Proyecto Clío |