Número 37 - 2011 | Depósito legal: M-9276-1998 I.S.S.N.: 1139-6237 |
Grupo Proyecto Clío:
Mª Pilar Rivero
( área de Didáctica de las Ciencias Sociales, Facultad de Ciencias Humanas y de la Educación, Universidad de Zaragoza, c/Valentín Carderera 4, 22003 Huesca.)
Diego Sobrino(comunicación y redes sociales)
Vescina, María Rosa
Prof. de Historia y Geografía
IPEM 118 Juana Azurduy
Córdoba Argentina
la.profe2008@yahoo.com.ar
Autores: Vescina, María Cristina - Vescina, María Rosa
Título: Tips para repensar la escuela en los nuevos contextos
Editorial: Ediciones Caraffa / Lugar de Edición:Córdoba, Argentina / Fecha de edición: septiembre de 2010 / ISBN:978-987-05-9360-7 / Número de páginas: 136
El objetivo del libro es movilizar el pensamiento, el cuestionarse sobre qué es el aprendizaje, cómo se produce y qué factores influyen en este proceso. A partir de este cuestionamiento, cada integrante del acto educativo podrá discernir sobre las mejores estrategias para lograr la formación de ciudadanos responsables y libres, capaces de resolver nuevas situaciones en la vida.
La propuesta a partir de este libro, es reformular la enseñanza de las Ciencias Sociales para que el niño, protagonista de su propia construcción de saberes, desarrolle el gusto por aprender, investigar, descubrir, elaborar hipótesis, etc. para lo cual nosotros como docentes debemos actualizarnos permanentemente en el uno de las NTIC, de lo contrario les estaremos pidiendo a nuestros alumnos que atrasen veinte años en su forma de estudiar.
Existen unas competencias básicas a adquirir durante el proceso educativo.
Comprensión y producción de textos orales y escritos, aumentando su complejidad conforme avanza en los distintos niveles educativos (inicial, primario, secundario superior o universitario).
Abordaje y resolución de problemas. Ante una situación problemática, evaluar los elementos que se presentan y proponen posibles soluciones a partir de ellos.
Esto nos llevará, sin duda alguna, al eje fundamental de esta nueva escuela del siglo XXI que es el “aprender a aprender” abandonando las posturas memoristas sin intervención de la razón.
Y de este aprender a aprender se desemboca en aprender a vivir juntos, lo cual nos llevará a una mejor vida familiar y en sociedad, evitándose así la violencia y la intolerancia, tan de moda por estos tiempos.
Podemos concluir que se aprende haciendo, trabajando con las nuevas disciplinas curriculares y con nuevos agentes educadores (para bien o para mal, según su uso y/o abuso) como la TV, la radio y el Internet
Se debe apuntar los rumbos de la nueva escuela a la construcción de capacidades para el mundo actual, en lugar de de solo tratar de construir competencias, es decir, poco sirve formar memoristas si no son capaces de obtener lo esencial de la información para poder transferirla luego a otras situaciones problemáticas optando por el camino correcto.
Edgar Morin sostiene que “una cabeza bien puesta vale más que una cabeza bien llena…”, esto permitirá usar la cabeza para PENSAR y no solo para repetir mecánicamente recetas mágicas que se esfuman ante situaciones problemáticas desconocidas.
También propone una educación -su construcción y acceso al conocimiento- que sea capaz de formar personas con criterios que puedan integrar los conocimientos sin hiperespecializaciones atrofiantes previendo además la posibilidad de errar, pues aunque la ciencia se rige por leyes aparentemente inamovibles, éstas son susceptibles de error constantemente. (E. Morin – Los siete saberes)
El ser humano por naturaleza “hace ciencia” como una forma de conducta y no una simple acumulación de datos y fórmulas.
El experimentar, entendiéndose como tal el conjunto de hechos y vivencias externas e internas, es el conjunto de hechos con los que todos los seres humanos se encuentran.
La ciencia puede ser entendida como un arte, el arte de generalizar las vivencias de un hecho; o como la búsqueda de principios generales para explicar experiencias individuales. Cualquiera de las formas de entender la ciencia es considerada como expresión de la creatividad, por lo tanto este proceso de la adquisición del conocimiento es por un lado acción y por el otro, reflexión.
El hecho del conocimiento es en si mismo una acción creativa.
Para el logro del conocimiento solo basta un entrenamiento simple, “Educación para pensar, educación para enseñar y educación para razonar” y propender al destierro definitivo del enciclopedismo
El docente no debe contarles las cosas a los alumnos, sino por el contrario, debe acompañarlo en el proceso de descubrimiento, permitiendo los errores y a partir de ellos crecer con el uso del razonamiento
La acción de una sociedad a través de la educación se da como un proceso donde debe mantenerse la calidad a la vez en todos los niveles educativos.
Además la educación debe contemplar tanto la formación de los principios y valores éticos, así como el entrenamiento para aprender a razonar y adquirir conocimientos. Por lo expuesto, la educación debe propender a una formación integral del ser humano…
El objetivo de este libro es movilizar el pensamiento, el cuestionarse sobre qué es el aprendizaje, cómo se produce y qué factores influyen en este proceso. A partir de este cuestionamiento, cada integrante del acto educativo podrá discernir sobre las mejores estrategias para lograr la formación de ciudadanos responsables y libres, capaces de resolver nuevas situaciones en la vida.
Las Ciencias Sociales al igual que las otras ciencias se rigen por las mismas técnicas, por lo que debemos abandonar las posturas arcaicas en la enseñanza de la historia y geografía y adecuarnos a los nuevos tiempos que nos ponen frente a un torbellino de información y nuevas tecnologías.
La propuesta es reformular la enseñanza de las Ciencias Sociales para que el niño, protagonista de su propia construcción de saberes, desarrolle el gusto por aprender, investigar, descubrir, elaborar hipótesis, etc. para lo cual nosotros como docentes debemos actualizarnos permanentemente en el uno de las NTIC, de lo contrario les estaremos pidiendo a nuestros alumnos que atrasen veinte años en su forma de estudiar.
Hoy en día contamos con infinidad de material bibliográfico y virtual para que nuestras clases sean atractivas y llamativas, logrando la concreción de nuestros objetivos pedagógicos. No debemos tener miedo a las nuevas tecnologías, dejémonos ayudar, en este camino compartido, por nuestros alumnos y juntos construyamos nuestro conocimientos. El “yo te enseño, tú ¿me enseñas?”, nos brinda amplias posibilidades de levantar la autoestima del niño que pondrá todas sus potencialidades en marcha para construir su propio andamiaje de conocimiento y ser así un ciudadano libre y autosuficiente.