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Manual para el desarrollo de proyectos educativos de museos

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Ficha Técnica:

CUENCA LÓPEZ, JOSÉ MARÍA y MARTÍN CÁCERES, MYRIAM JOSÉ. (2014). Manual para el desarrollo de proyectos educativos de museos. Trea, Gijón. 141 páginas. ISBN: 978-84-9704-819-4

Nayra Llonch Molina
Universitat de Lleida
nayra.llonch@didesp.udl.cat

Esta publicación se encuadra dentro de la colección “Manuales de museística, patrimonio y turismo cultural” que la editorial Trea (recientemente premiada por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte con el Premio Nacional a la Mejor Labor Editorial) está llevando a cabo en los últimos años. Se plantea el libro como una propuesta desde la que partir para desarrollar una planificación educativa que pueda orientar el diseño didáctico de las instituciones responsables de la comunicación del patrimonio, de manera que se articulen actuaciones educativas sistemáticas, basadas en posicionamientos interdisciplinares, simbolico-identitarios, participativos, multidisciplinares y sociocríticos. Así, el patrimonio se puede convertir en un revulsivo para potenciar en la ciudadanía valores sociales, de carácter intercultural que permitan una socialización del patrimonio.

Este trabajo es fruto de más de quince años de investigaciones, experiencias y reflexiones en los que se ha conjugado la teoría y la práctica en el ámbito de la educación patrimonial y a la museografía didáctica. Aquí, se funden resultados de estudios desarrollados en el marco de diversos proyectos de investigación del Plan Nacional de I+D+i en los que los autores han participado como miembros del grupo de investigación DESYM (HUM-168 del Plan Andaluz de Investigación) de la Universidad de Huelva: El patrimonio y su enseñanza: análisis de recursos y materiales para una propuesta integrada de Educación Patrimonial, Evaluación Cualitativa de Programas Educativos en Museos de España y Educación Patrimonial en España: consolidación, evaluación de programas e internacionalización del Observatorio de Educación Patrimonial en España.

El libro se organiza en ocho capítulos, comenzando por la explicitación de qué es un proyecto educativo de museo y qué sentido puede tener en la sociedad actual, dentro de la oferta sociocultural existente, desde la perspectiva de la educación formal, no formal e informal. A este primer capítulo le siguen otros cinco, donde se establecen los parámetros y estructura básica que debe configurar cualquier proyecto educativo centrado en la comunicación patrimonial. Los dos últimos capítulos recaen en el análisis y reflexión sobre la práctica, incidiendo en ejemplos relevantes de propuestas didácticas que pueden convertirse en modelo de proyectos educativos de museos.

Entrando en una valoración capítulo a capítulo, en el primero de ellos (“Los proyectos educativos de museos: qué son”) se establece la estructura de un proyecto educativo de museo, determinando cuál es el sentido que le otorga al museo, qué se entiende por patrimonio y por educación patrimonial. El capítulo concluye planteando la visión de los autores respecto a los proyectos educativos en el ámbito museístico, explicando sus características genéricas que se establecen en los siguientes capítulos del libro.

En el segundo capítulo (“Para qué se hacen? Finalidades y objetivos en los proyectos educativos de museos”), partiendo de las finalidades genéricas de la educación, relevantes para el diseño de proyectos didácticos en museos, se estructura una propuesta de objetivos dirigidas a los ámbitos educativos de carácter formal, no formal e informal. En el ámbito formal, las características del público al que se dirigen las propuestas didácticas, en función de los diferentes niveles educativos existentes, hacen que la planificación sea más homogénea y que pueda ligarse, para desarrollar propuestas coherentes, con las normativas educativas establecidas por las administraciones competentes. Por otro lado, los ámbitos educativos no formales e informales cuentan con características más heterogéneas y menos reglamentadas, que permiten un tratamiento más abierto, aunque siempre dentro de una rigurosidad necesaria para este tipo de proyectos.

El tercer capítulo (“¿Qué podemos trabajar en los proyectos educativos de museos?”) se centra en plantear cuáles son los contenidos básicos sobre los que debe diseñarse un proyecto educativo de museo. Se parte de una visión general, en la que se estructuran las líneas genéricas de trabajo y, en un segundo apartado, un planteamiento más específico de contenidos que pueden abordarse a partir de las premisas establecidas, basadas en una concepción didáctica del museo desde posicionamientos interdisciplinares, sistémicos y socializadores.

En el cuarto capítulo (“¿Cómo desarrollar los proyectos educativos de museos?”), partiendo del concepto de interpretación y de su aplicación al patrimonio, se plantean modelos de estrategias metodológicas, tipologías de actividades y criterios para el diseño de las mismas, de interés para el desarrollo de estos proyectos didácticos. El punto de partida se sustenta en la participación, la motivación y la interacción y debe atender a la contextualización, a la conexión con el entorno y al tipo de comunicación.

En el capítulo quinto (“¿Qué materiales y recursos de apoyo podemos usar en un proyecto educativo de museo?”), se presenta un banco de recursos y materiales que pueden emplearse para el desarrollo de una propuesta de comunicación patrimonial genérica, que podrán variar en función de las características del museo o centro de interpretación y de los criterios establecidos en el mismo proyecto educativo. Se diferencia entre recursos materiales y recursos humanos. Entre los primeros se establecen aquellos instrumentos didácticos físicos o virtuales cuya finalidad es apoyar la propuesta de comunicación patrimonial establecida en el museo. Los segundos hacen referencia a las personas que participan en el proceso de comunicación, facilitando tanto la propia visita como la interpretación que los visitantes realizan de los referentes patrimoniales presentados en la institución.

Para los autores, la evaluación es un elemento crucial de todo proyecto educativo, debiendo estar plenamente relacionada con las finalidades, los contenidos y la metodología indicados en los capítulos anteriores y han de desarrollarse a partir de las propias actividades que se propongan. Todos estos aspectos se presentan en el capítulo sexto (“¿Qué valorar en un proyecto educativo de museo y cómo evaluarlo?”). Se realiza un planteamiento conforme a cuatro tipos de evaluación que han de desarrollarse a lo largo de todo el diseño e implementación del proyecto educativo de museo, para lo que se proponen diferentes técnicas e instrumentos de obtención de información para su evaluación. Finalmente, se establecen los criterios evaluativos a partir de una rúbrica, siguiendo los parámetros que se establecen en la educación formal y que permiten hacer una valoración más sistemática de la propuesta de comunicación.  A su vez, esto permite arbitrar propuestas de mejora de los propios programas.

En el séptimo capítulo (“¿Qué se está haciendo? Algunos ejemplos.”) se presentan algunos proyectos educativos y/o actividades que se desarrollan en diferentes instituciones museísticas españolas. El capítulo se articula a modo de fichas donde, además de la descripción de la experiencia, se exponen los objetivos, el tipo de público destinatario de las actividades, así como las fuentes a acudir para saber más sobre la propuesta.

Ya en el octavo capítulo se diseña un proyecto educativo (“Una propuesta práctica: el proyecto educativo de la Ruta Megalítica Onubense.”), bajo las premisas que se han defendido a lo largo de este libro, centrado en una propuesta de mejora sobre el caso de un itinerario patrimonial existente (la Ruta Megalítica Onubense), a modo de ejemplificación, sobre un ámbito territorial amplio, que incorporaría diversos espacios, instituciones y poblaciones, atendiendo más al elemento patrimonial y su contexto sociocultural y territorial, que al componente administrativo que supone la institución museística al que se asocia.

El libro finaliza con un glosario aclaratorio sobre los conceptos más relevantes tratados, una serie de lecturas de interés recomendadas para ampliar conocimientos y experiencias sobre la temática. Es de destacar la presencia de diversas tramas de contenidos, tablas y cuadros, que junto a las imágenes ejemplificadoras que se presentan aportan un interesante aparato gráfico.

La intención es que este libro pueda ser útil para la dinamización social del patrimonio y de las propias instituciones patrimoniales, aplicable directamente a la práctica de los procesos de comunicación patrimonial, en los diferentes ámbitos educativos, formal, no formal e informal, en los que los museos pueden participar.